“El mundo es de los insatisfechos”. Daniel Servitje, en diez años, ha protagonizado la adquisición de 43 empresas que ha fortalecido la penetración de Grupo Bimbo en todo el planeta. No ha sido fácil. Incluso, su historia pudo tomar otro camino: “Me maravillo de por qué estamos donde estamos, cuando el fracaso estuvo a la vuelta de la esquina”.

Daniel Servitje, es director general de la empresa desde 1997, y presidente del Consejo de Administración a partir del 1 de julio de 2013.

"Ciertamente somos la empresa más importante de pan en México, como somos la empresa más importante de pan en el mundo, pero en realidad es que la participación de nuestra empresa en el mercado es ínfima y la participación de Bimbo en el mercado mexicano es muy pequeña”, dice Servitje.

¿Cómo es que Bimbo se adapta a las nuevas tendencias por una mejor alimentación? Nuestra misión es alimentar, deleitar y servir al mundo. Con esto, lo que decimos es que somos una empresa de alimentos. Dos, creemos en la preferencia del cliente, del consumidor, entra por el paladar y creemos que la base de la alimentación tiene que ser una dieta balanceada.

Suscribimos con la Organización Mundial de la Salud cinco compromisos y los estamos cumpliendo, lo que implica una reformulación de nuestros productos, una promoción muy activa de la actividad física y prácticas correctas de mercadotecnia. En ese sentido creo que la empresa esta cumpliendo en la parte que le puede tocar para ayudar a resolver el problema de la obesidad.

¿Qué tanto entra su gusto por los productos al momento de entrar a otros mercados? La decisión de qué producto va, dónde se anuncia o si se exhibe de una forma u otra corresponde a los equipos locales.

¿Cómo administrar una empresa global con el tamaño de Bimbo?Son 131,500 empleados al día de hoy. [Los administro] con mucha humildad, con los pies en la tierra, tratando de entender los problemas y oportunidades en cada lugar.

¿En cuántas personas confía? Yo confío en todos los que trabajan en la compañía, porque si les perdemos la confianza no pueden estar en la empresa, aunque evidentemente no tengo trato con ellos. Yo tengo trato directo con siete u ocho colaboradores que me reportan y tenemos reuniones donde nos vamos involucrando en distintos momentos con grupos más grandes.

¿Qué es lo que ha fallado? En 2009, con la adquisición de Weston Foods, en un momento crítico para el mundo porque apostamos prácticamente a la compañía en un año de crisis, hicimos lo que fue la adquisición más importante para la compañía. A partir de ese momento, la compañía tomó escala, generó buenos números y la valuación de la empresa ha tenido un crecimiento importante. Yo diría que, si no teníamos éxito en Estados Unidos, podíamos poner en riesgo toda la compañía.

“Este no es un negocio de llevar hombres a la Luna, sino de satisfacer el paladar día a día”, dice Daniel.

Seguramente tiene un manual de cómo una empresa mexicana puede competir en el extranjero… Tenemos lecciones aprendidas, más que un manual. Yo te diría que un punto muy importante es hacer altos en el camino, porque si uno tiene un solo manual y en el manual no está el corregir el camino, se va a equivocar muy pronto. Dos, yo sí soy ferviente de la globalización y de la internacionalización, pero creo que esto requiere de una visión a largo plazo y de los Consejos de Administración de soportar la internacionalización con paciencia, con un entendimiento estratégico de para qué lo queremos hacer.

Forbes acaba de ubicar a Bimbo en el lugar 83 de las 100 empresas más innovadoras del mundo.

¿Bimbo es un laboratorio como las grandes empresas de tecnología? No bueno, tenemos cuatro centros de innovación donde trabajan cientos de colaboradores en la parte de formulación de nuevos productos, de desarrollo de empaques, pero también innovamos a lo largo de nuestros procesos. Para que tengas una idea, cada día 40 millones de paquetes son elaborados, horneados a lo largo de nuestras 171 plantas y eso implica muchos procesos de innovación.

¿Hacia dónde más va a crecer Bimbo? Se ven muchas oportunidades de crecimiento en los mercados emergentes, en profundizar las categorías en donde participan en los mercados en donde ya están, y en atender a muchos más clientes que los que hoy ya atienden.

Su plan estratégico, que lo presume mucho en sus reportes, habla de ser la mejor pacificadora del mundo en 2015… Creo que tenemos techo por recorrer, debemos tener claros los gaps que nos quedan y, donde no los tengamos identificados, tendremos que abrirlos. Otra vez, el mundo es de los que están insatisfechos, no de los que ya comieron todo lo que querían.

EL PREMIO FORBES MÉXICO 2014.

El pasado 30 de septiembre, en el marco de la segunda edición del Foro Forbes México, Daniel Servitje, presidente del Consejo de Administración y director general de Bimbo, fue reconocido con el Premio a la Excelencia Empresarial 2014, por su estilo y su gestión, pero, sobre todo, por las prácticas corporativas aplicadas en su empresa en materia de innovación, promoción del talento humano y sustentabilidad.

• Es licenciado en Administración de Empresas por la Universidad Iberoamericana.

• En 1987 obtuvo la maestría en administración de negocios (MBA) en la universidad de Standford.

• Se unió a Grupo Bimbo en 1982, donde ha ocupado diversos cargos, como Subdirector de la Organización Bimbo, Director General de la Organización Marinela y Vicepresidente de Grupo Bimbo.

• En 2013, la marca y el nombre de la compañía, Bimbo, fue reconocidas como la primera y séptima marca de alimentos más fuerte de América Latina y el mundo, respectivamente, por Kantar Worldpanel.

• En 2014, fue reconocidas por Interbrand como la quinta marca más valiosa de México.

• Es la compañía de panificación más grande del mundo y una de las compañías de alimentos más grandes del continente americano, según IBISWorld.

• Opera en 22 países, mantienen un portfolio diversificado de más de 10,000 productos y más de 100 marcas, incluyendo Oroweat, Arnold, Marinela, Barcel, Thomas’, Sara Lee, Ricolino, Tía Rosa, Pullman, Rainbo, New York Bakery Co y Supan.

• Opera 171 plantas y su red de distribución directa incluye aproximadamente 53,000 rutas, repartidas en más de 1,600 centros de ventas, alcanzando más de dos millones de puntos de venta.